La mutilable levedad del ser humano - ABARA (Tsutomu Nihei, 2005)

El críptico y oscurísimo, como de costumbre, Tsutomu Nihei, es capaz de marearte cuando tratas de introducirte en su universo imposible de vacios blancos y ultraviolencia exagerada. Pero él es así, o lo odias, o te encanta, sin medias tintas. En Abara, como pasa con Blame!, puedes tratar de seguir y entender su tosca narrativa, pero, a parte de una ligera desorientación, sólo conseguirás quedarte embobado intentando ubicarte, o pasar la página y leer rapidamente para ver si así encajas las piezas del bizarro puzle que tiene en mente el autor. Por tanto, lo mejor que puedes hacer es deleitarte con su extraño mundo de criaturas exageradamente inhumanas que se desgarran las carnes (porque mira que le gustan a este hombre las mutilaciones y evisceraciones) en un ambiente cyber/biopunk lleno de sucios escenearios, cableados escorcicos y horizontes infinitos.

Abara es todo esto, y un poquito más. Desde las entrañas de una ciudad de esas a las que el apelativo postapocalíptico no hace justicia, un mal ya conocido vuelve a hacer acto de presencia. La colosal amalgama de carne y cemento a la que llaman Gauna Blanco. Los pobres y sencillos seres humanos nada pudieron hacer con sus endebles cuerpos mas que usar su intelecto para crear otro tipo de aberración que pudiese combatir este tipo de enemigo, el Gauna Negro. Guerreros oscuros, con exoesqueleto metamórfico y una habilidad sobrehumana para triturar y deshacer toda bizarrada malencarada. Imposible saber qué es cada cosa o por qué hacen lo que hacen para que, al final... fundido en negro.

Nihei no da explicaiones, Nihei coge las explicaciones y las retuerce cual amasijo de hierros rotos salpicados de sangre negra. Y lo mismo trata de hacer con los cerebros de sus lectores. Extrañamente, tanto grafismo como historia crean un todo que provoca extraños gorgoteos purulentos en el interior de nuestros cráneos, efecto secundario que nos permite entrar en profundo trance necesario, sin duda, para poder disfrutar de esas aberraciones gigerianas enfundadas en confusos y millerescos claroscuros.

Una delicia para casi todos los sentidos (en especial para ese que actúa cuando lames algo y te sabe a una cosa que habías olido un día que tocaste un perro mojado y muerto). Editada por Panini en dos tomos que se pueden comprar aquí y en los cuales desconozco si aparecen sus dos capítulos extra (tengo mis dudas que sean parte de este manga), donde se cuenta una historia alternativa ambientada en el mismo mundo, o eso creo. De todas formas, todo lo mentado se puede leer online pinchando en el siguiente link.


2 desperdicios en el patio:

Xesu dijo...

Me gustó Blame! pero no sé si estoy preparado para otra obra de Nihei y eres de los pocos que ha hablado bien de Abara xDD Le echaré un ojo a ver...

CryingMonster dijo...

¿He hablado bien? y yo que pretendía todo lo contrario xD... Si te gustó Blame! a lo mejor éste no, en dos tomos cuenta más que Blame en ocho. De todas formas, es una gozada visualmente, y, no sé si es impresión mía, pero el dibujo mejora capítulo a capítulo. Ah, y no te enfades conmigo cuando llegues al final X)

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